miércoles, 12 de septiembre de 2007

Mi Primera Vez

Recuerdo la primera vez que fuí al gimnasio como si fuera ayer... bueno, de hecho ya no me acuerdo bien.

El chiste es que llegué, todo nervioso, sintiendome chiquito chiquito chiquito, y la chava del mostrador muy ceremoniosamente ( que pedo con mis adjetivos??) me llevó hacia un entrenador de mediana edad y con físico de "en viejos y mejores tiempos..." que me trató amablemente y me pusó a hacer chingomil minutos de bicicleta disque para "cardio" (que yo pensé era una pinche enfermedad) y cuando estaba mas cansado que la madre me puso a hacer no sé que pendejada con mancuernas de mil ochomil kilos (insisto, ya no me acuerdo) que al puto día siguiente no me pude ni levantar.

Nótese que yo al entrenador con físico de "en viejos y mejores tiempos..." no le tenía mucha confianza por obvias razones, entonces no duré mucho con y me pasé a la tarde.

De eso si medio me acuerdo porque llegué con un entrenador así todo mamey, mas bajito que yo, y con cara de muchos amigos. Le dije de la manera mas educada posible - me tienes que entrenar, porque gracias a mi te pagan tu misero salario - y el dijo algo así como - claro mi amo, en seguida haré que venga un séquito de mujeres a limpiar su sudor -...

En realida fue algo así:
Yo: Hola, disculpe, esteeee... es que he estado viniendo en la mañana pero ya voy a empezar a venir en la tarde y quisiera ver si me pudiera usted entrenar
El: (me viborea y contesta despectivamente) dile a el otro entrenador.

y se dió la vuelta y me dejó ahí todo sacado de onda.

El chiste es que recogí mis cachivaches y me fuí al otro lado del gimnasio (estuviera tan grande) y llegué con un mono como de 1.80, si no es que mas, calvo, super duper mamadisisisismo, y con nada mas que un overol así como clásico cliché gay (incluso el bigotito). Yo hablando con el se vió algo así:

Púchale aquí

El chiste es que este wey también me miró así de reojo, y me dijo - dile al otro entrenador - y yo así de "AY NO MAMES!". Estimado lector, favor de imaginarse el clásico:

Yo: -Papá ¿puedo ir al cine?-
Papá: Preguntale a tu mamá
Yo: Mamá ¿puedo ir al cine?
Mamá: preguntale a tu papá

Le dije de la manera mas educada posible intentando ocultar mi ira y mis ganas de matarlo a huarazhazos, pero como no llevaba mas que tennis me contuve y le dije -Es que el otro me mandó con usted- y ya puso cara así como que de "grrrr!" y me puso a hacer ejercicio.

Nuestra interacción Sensei-Kimosabi (jajaja) duró poco, porque me harté de que me pusiera siempre lo mismo y me empecé a hacer pendejo, luego me pasé a la mañana, empecé a entrenar solito y santo remedio!

en fin....

Saluditos!

5 comentarios:

Noemí dijo...

pon fotos! pon fotos!
jaja yo recuerdo que a mi me cagaba que me entrenaran, porque no me gustaban unos aparatos, preferia hacer muchos abdominales
y tambien me acuerdo que el primer dia me pusieron a mi en ves de hacer bicicleta, me pusieron en la caminadora y camine chingos y chingos y me canse a la verga y estaba sudando a punto de desistir y mi entrenador estaba viendo "el show de cristiana" en la tele

y ps por eso ya no voy
ah si y porque ya no trato de impresionar a gladys u_u


saludOs!

Anónimo dijo...

jajajaja me hacia falta reir.... recuerdo cuando iba al gimnasio (uuuuuuhhhhh) y pasaba eso xDDD

Ahora vivo apaciblemente sin ejercico jajajajajaja pero ya volvere.... creo o.o-

Púrpura dijo...

Ñau, esta fallando esto...
Bueno te deje un post en mi blog, te gustará.

Besos.

Almendrae dijo...

ô.o vaya,.. tienes mucha voluntad. Porque, para empezar a mí me duran las ganas del ejercicio dos días, y las fiestas en el colegio ^_^.

pero es necesario...
u.u

te apuesto q esos entrenadores tenían menos voluntad q tú ¬¬.

ayyy.. hoy vi a un niño grandotoootototote, abrazando a su novia así chiquita jajaja. es tierno, xD no pude evitarlo, me acordé de eso antes de ver los sumos. =P

te cuidas niño invisible.
^^ biee!

Almendrae dijo...

PD: ey ey, estabas triste... o.o?